Reseñas de libros

Esta pareja me ha conquistado sobre todo por su sinceridad, porque no esconden cómo se sienten y a pesar de las estrictas reglas de comportamiento, se entregan el uno al otro de forma natural, sencilla.

La historia de Kiara y Eirian abre un universo distópico en el que los humanos y los vampiros están condenados a entenderse y sobre todo a amarse.

Esta novela arranca muy bien en cuanto a la trama. El averiguar lo que pasó, las pesadillas y el intentar encajar las piezas que componen ese puzzle podría haber dado paso a una novela intrigante e interesante; sin embargo hay cosas que la hacen poco verosímil.

Héctor es lo único que merece la pena de esta segunda entrega. El hombre maravilloso en el que se convierte eclipsa a Sofía por completo que se desdibuja en esta historia.

Esta historia juega con los sentimientos del lector y nos hace plantearnos situaciones desde diferentes puntos de vista: el bien, el mal, lo correcto, lo incorrecto... siempre hay que decidir. "Que lo que quieres no haga que se te olvide lo que mereces"

Rose y Richard son unos personajes que se hacen querer y que junto con los secundarios conforman ese maravilloso elenco que hace de esta serie una buena lectura y que siempre nos hacen desear leer el siguiente.

Todo lo que envuelve a esta historia de amor y de desamor es muy intenso, tanto por el contenido como por la forma de expresarlo.

Es una novela llena de recuerdos de la infancia, de amistad, de amor fraternal, de deseo sexual, de anhelo y del gran amor que ilumina los ojos pero que no aparece en el momento oportuno. Es una historia que deja al lector removido por dentro, por lo menos a mí me ha ocurrido.

Jude y Célian me han gustado a partes iguales. Se llevan mi cariño y me dejan con el recuerdo de una historia divertida con unos diálogos estupendos. Destaco los MARAVILLOSOS (en mayúscula) haceres y hablares de Célian. Estoy deseando leer más historias de esta autora.

Es una novela de fuertes sentimientos, de emociones estranguladas en el corazón, de sentir que esa es la persona de tu vida, de reconocerla y no entender qué te ha llevado a ese conocimiento, solo la certeza de que es así. (Koi No Yokan)