Título: El cielo está envuelto en cadenas
Autora: Pamela Díaz
Editorial: Circulo Rojo
Año de edición: 2017
Sinopsis
Vivir o morir.
Todo se reduce a eso.
Y en otras muchas ocasiones, simplemente a sobrevivir.
Pero ¿cómo hacerlo en un mundo lleno de sombras y sangre, de crueldad y violencia, de perversión e incertidumbre?
¿Cómo conseguirlo cuando la atracción entre dos almas destrozadas, cuyo destino está unido y regido por la muerte, la venganza y las mentiras, se torna en deseo, el deseo en amor y el amor en una enfermiza obsesión?
El pasado acecha.
El presente apremia.
Y el futuro no podría ser más desesperanzador.
Descubre la intrigante historia de Zack y Linda; dos corazones agrietados por profundas y horrendas cicatrices, donde la magnitud de lo que sienten es lo único que puede salvarles… Y también lo único que puede romperles por completo.
Mi opinión
En una de mis incursiones en La Paradeta romántica del Mercat Dominical de San Antoni (al que os animo a visitar si vivís o visitáis Barcelona alguna vez porque podréis encontrar desde joyitas históricas hasta contemporánea actual) encontré este libro. Me gusta pensar que él me encontró a mí, porque desde que vi la portada ya me cautivó y me lo llevé a casa. No indagué nada sobre él, solo leí la sinopsis. Lo estuve aparcando porque tenía lecturas pendientes, pero ahí estaba la chica de la portada que me miraba y me llamaba a gritos para ser escuchada. Hasta que al fin me decidí a no retrasarla más y leerla de una vez.
Y como siempre, cada vez que empiezo un libro que me ha llamado de esta forma, se convierte en una de mis mejores lecturas.
La historia parte de una joven psicóloga forense, llamada Linda, que está realizando un estudio en la prisión donde se hallan los reos de mayor peligrosidad para así poder realizar perfiles psicológicos que ayuden a la policía a atraparlos. El preso que se dispone a entrevistar es Zack Cassidy conocido sicario de la mafia mexicana, al que le han caído tres cadenas perpetuas por sus múltiples asesinatos. Así se conocerán nuestros protagonistas y ambos nos mostrarán su lado más distante y frío que irán abandonando a medida que avance la historia.
Linda es un personaje que en mi opinión no ha disfrutado de la vida, más bien la vida pasa por ella y se limita a pasar los días unos tras otros, sin tener más compañía que la de su amiga Angy que es todo lo opuesto a ella. Sufre pesadillas todas las noches con el asesinato de sus padres, pesadillas que no la dejan descansar ni seguir adelante con su vida. Esta circunstancia la ha marcado y de ahí esa máscara de frialdad y el ser distante con los demás. Tras la muerte de sus padres pasó a vivir con una tía que tampoco le dio el calor y el amor que una niña de su edad necesitaba en esos momentos.
Zack Cassidy ha pasado un infierno desde muy niño. Instruido para ser el perfecto asesino, no siente empatía ni remordimientos por nada de lo que hace. Su vida transcurría entre morir o matar y por supuesto él no iba a perecer. No cree distinguir entre el bien y el mal y eso lo sitúa en una zona de la oscuridad de la que es difícil, sino imposible, salir.
Con las entrevistas que ambos tienen en la prisión, muestran cada uno su lado más frío. Linda porque no debe confraternizar con un paciente y Zack porque está acostumbrado a intimidar para ser respetado. Se suceden muchas escenas de tensión que algún momento me tenían nerviosa escuchando ruidos yo en mi propia casa creyendo que Zack vendría a matarme (así soy yo cuando me meto tanto en la lectura) porque debo confesar que al principio me ponía los pelos de punta.
Ambos protagonistas están marcados por una infancia dura, difícil y de la que han salido como han podido adaptándose al medio que les tocó vivir. Los dos saben entender al otro. Linda por su profesión pero Zack es de esas personas que captan a los demás a la primera, que saben de qué pie cojean y en seguida descubre cómo es Linda en realidad y lo que esconde.
La atracción física de estos personajes es muy fuerte, ya empieza en las entrevistas en la prisión y sigue creciendo cuando fuera de ella, las circunstancias los llevan a vivir situaciones desesperadas.
La tensión sexual crece a medida que pasan tiempo juntos y es difícil de entender para Linda que un ser tan oscuro, que ha hecho tantas atrocidades consiga despertar en ella un deseo sexual hasta ahora desconocido. Ello la sume en una dicotomía durante toda la historia, que la hace estar en lucha consigo misma durante buena parte del libro, casi la misma que se experimenta como lectora, aunque Zack poco a poco nos conquiste. Para Zack no es distinto, él también siente ese deseo y esa necesidad con respecto a ella, pero piensa que en la situación en la que se encuentran sería un error dejarse llevar por esas emociones tan intensas.
Se vive mucha tensión con esta historia y todo está muy bien construido para que no demos más importancia a la trama amorosa que a la de thriller. De hecho van tan ligadas que no sabemos donde empieza una y acaba la otra, si no fuera así quizá la historia de amor sería muy diferente.
Habrá mucha gente que no vea claro el amor de esta pareja, quizá sus instintos parezcan muy primitivos. Por mi parte los he comprendido a la perfección. No son personajes edulcorados, ni tampoco los protagonistas a los que estamos acostumbradas. Lo que sienten se acrecienta con el paso de los días y por los factores externos que les hacen estar constantemente pensando que la muerte les acecha. Su relación se basa en el sexo primordialmente (aunque no por ello creáis que hay un sin fin de escenas eróticas porque sorprendentemente no es así) en demostrar a través del sexo lo que significan el uno para el otro, porque las palabras en este caso no son su fuerte ni explican lo suficiente. Sienten una necesidad imperiosa de estar juntos y a la vez de estar separados.
Es una historia muy bien escrita, que me ha tenido en un sin vivir constante por todo lo que ocurría y que me ha hecho disfrutar tanto como ponerme en un estado de nervios continuo. Los diálogos están llenos de reproches, de deseo descarnado, de pasión cegadora y también de entendimiento y de aceptación del otro. En cuanto a la narración es cierto que en algún momento aparecen expresiones o adjetivos que sorprenden porque no solemos utilizarlos de esa forma, pero a mí no me sacaron de la lectura.
Zack es un protagonista de los que me gustan a rabiar. Tiene un lado oscuro que mantiene de principio a fin, no cambia su esencia a lo largo de la historia y se mantiene fiel a sí mismo. Es de esos personajes que ocupan todo el espacio cuando están escena. Su personalidad, su gesto, su seguridad al hablar y esa sexualidad arrolladora hace que no se pueda prestar atención a otra cosa.
Definitivamente, Pamela Díaz ha entrado a formar parte de esas autoras a las que voy a seguir la pista. Ya tengo en mi poder Fragmentos, que de hecho es el primero de esta serie, y no creo que tarde mucho en leerlo. Aunque de momento no parece haber publicado nada más.
Ha sido una lectura estupenda que he vivido con tanta intensidad que no puedo hacer más que recomendárosla. Pero como siempre digo, leedla y me contáis.
Mysticnox
Curiosamente tengo Fragmentos en digital. Supongo que al decir que esta es la segunda te refieres a que la historia es de unos personajes secundarios.
Interesante lo que cuentas, la verdad, y me llama mucho la atención. Puede que me anime y me atreva con ella
Es un placer leer tus opiniones y aquí seguiré en 2019
Un abrazo
Sí, los protagonistas en este libro son otros. Y si la lees pásate por el blog y me comentas lo que te parece.
Gracias Carmen.
Un beso.
Pille este libro hace siglos por amazon y aún no tenido el placer de leerlo, así que después de leerte, habrá que hacer hueco, buen post, feliz año y besos
¡Anímate Noe!
Gracias guapa y feliz año para ti también.
Un besooo
Doy fe de cómo lo has vivido y lo tengo pendiente para leer sí o sí.
Ay q bien te ha salido la reseña, nena. Muy buena, se palpa la tensión con la q lo has vivido y lo mucho que lo has disfrutado. Doy fe
Muassss
¡Ay Yola!
Léelo porque estoy segura de que te gustará mucho.
Muacsssssss