Best man de Katy Evans

Sinopsis

Es la boda de sus sueños, pero con el novio equivocado… Lia va a casarse con Aaron y ha planeado hasta el último detalle de la boda. Pero Aaron se ha olvidado los anillos en casa, así que Lia decide conducir cinco horas para ir a buscarlos. La acompaña Miles Foster, el mejor amigo del novio y padrino de la boda. Cuando una tormenta de nieve los deja atrapados toda la noche en un refugio, Lia se preguntará quién es el mejor hombre para su futuro.

Mi opinión

Best man es un cambio de registro de esta autora. Este libro no narra una pasión arrolladora ni múltiples problemas sin resolver en el pasado de los protagonistas. Este libro es mucho más sencillo, por decirlo de algún modo, aunque eso no resta importancia a lo que la autora nos ha querido contar aquí.

Empieza la novela con una novia que no tiene claro si se va a casar o no. Es una historia que empieza por el final, algo que en romántica se suele leer en el epílogo y que culmina una historia de amor. Sin embargo aquí se desmonta esa idea para mostrarnos un romance al revés.

Lia es una joven que había soñado con su boda desde el inicio de los tiempos y por ello quería que fuera perfecta. Lleva casi dos años planeándola al milímetro sin que su novio Aaron haya hecho nada por ayudarla. Solo tenía que hacer una cosa, llevar los anillos y los ha olvidado. La idea de recorrer horas en coche para ir a buscarlos no entra en sus planes tampoco, puesto que se ha ido de despedida de soltero y no está en condiciones de conducir; así que Lia, obsesionada por su boda perfecta, decide ir ella misma a buscarlos. Su novio enviará a Miles, su mejor amigo y padrino, para que la acompañe y ambos emprenderán un viaje complicado para Lia puesto que no puede olvidar lo que sucedió cuando conoció a Miles en su primer año de universidad.

La novela está narrada en primera persona, en la voz de Lia. Y en esta ocasión creo que es un acierto puesto que lo importante aquí es la evolución y la personalidad de Lia. Solo así podremos entender sus reacciones y darnos cuenta mucho antes que ella de cuales son sus verdaderos sentimientos.

La historia es sencilla, tierna y al inicio divertida. Lia es una joven a la que le gusta tener todo planificado, sin sobresaltos y no salirse del guión. Pero a la vez es muy insegura y se infravalora en multitud de ocasiones, aceptando situaciones que no debería pero que siempre acaba justificando. Durante ese viaje en coche nos explicará en flashbacks que ocurrió con Miles y cómo acabó saliendo con Aaron.

La novela avanza con agilidad comprobando el lector cuánto se está equivocando Lia y sin embargo ella no acaba de caer en la cuenta. Se engaña a sí misma e insiste en seguir en su mundo perfecto. Esos momentos de viaje guardan reflexiones, anhelos, emociones y diálogos divertidos en los que Miles parece siempre un poco gruñón y no llegamos a saber qué piensa de verdad. No obstante, esa atmósfera cambia cuando todo se desborda y ambos protagonistas se sinceran.

Es una historia a la que no le hace falta ambientación, solo una tormenta de nieve y dos personajes que no afrontan la realidad hasta que les cae encima y no les queda remedio.

El final es rápido y corto. Me ha dejado con ganas de saber más de Miles pero sobre todo de saber de los dos, porque ni siquiera hay epílogo. Aun así, esta historia no va tanto de la pareja que forman como de la evolución del personaje de Lia. De cómo es capaz de tomar decisiones y de expresar a los demás lo que quiere y siente sin engañarse a sí misma.

Gracias a la editorial por el ejemplar