Cuentos de amor y lluvia en Seúl (Indomite 2) de Natalia Sánchez Diana

Título: Cuentos de amor y lluvia en Seúl (Indomite 2).

Autora: Natalia Sánchez Diana.

Editorial: Autopublicada.

Año edición: 2021.

Sinopsis

Jiyong lleva años intentando ser mejor. El maknae de Indomite es un actor de éxito por su carisma y su personalidad arrolladora. Sin embargo, nada de eso parece servirle para llegar a Haru, la chica del ceño fruncido que nunca se ha enamorado.
Y que, hasta hace poco, le odiaba. Y no sin razón.
El destino tuvo una extraña manera de entrecruzarlos.

Haru no quiere orbitar alrededor del chico planeta que con su acento de Busan y su sonrisa es capaz de convertir su corazón en un meteorito en caída libre.

Pero esta historia no es solo la suya.
Un nuevo estudio para Dress&Dream, un príncipe de hielo, palabras en francés, chicos perdidos que aman demasiado la música y hasta la prima de Macarena, que arrastra una curiosa maldición.

Mi opinión

De nuevo nos encontramos con los chicos y chicas de Indomite que viven, sueñan y se enamoran en Seúl. Es una novela coral, como la anterior, donde cada personaje tiene su propia voz y se entremezclan sus historias de modo que todas atraen a partes iguales.

En esta quizá nos fijaremos un poco más en Haru y Jiyong que tenían mucho que contarnos y a los que todavía les queda camino que andar juntos.

En la relación de Haru y Jiyong su pasado en común se entremezcla de una manera que parece el tercero en discordia y aunque los árboles no les dejen ver el bosque tampoco pueden evitar sentir lo que sienten.

A pesar de toda la reticencia de Haru en la entrega anterior no solo a enamorarse sino además a hacerlo de Jiyong, se evapora ante la evidencia de lo que siente, ha sido fantástico ver su evolución. Además es capaz de ver en Jiyong al idol que fue y lo que ha cambiado para bien, aunque a él todavía le cueste hacerlo.

Jiyong es un joven herido que cree que destroza lo que toca, que todo lo abandona… No obstante al verse en los ojos de Haru, quiere ser mejor persona para ella, por ella, porque le hace sentir cosas que nadie más ha conseguido y porque ve quién es en realidad más allá de su imagen de maknae de los Indomite.

Comparten unos momentos dulces, intensos, anhelantes y románticos en los que a pesar de la experiencia personal de Jiyong, se ve arrasado por la intensidad y la entrega de Haru. Hay un cambio de roles emocionante y que nos muestra la vulnerabilidad de alguien que está en la cima de su carrera, que es un triunfador.

Al ser una novela coral no solo las parejas tienen su propio tempo, sino que también lo tienen los propios personajes. Se nos explica todo en su justo momento, sin abotargarnos la cabeza con demasiada información para que podamos conocerlos bien y ansiemos saber más. Se consigue un buen equilibrio entre las diferentes historias aunque alguna tenga un poco de más relevancia y otras nos esperen en posteriores entregas porque requieren de mayor detalle y desarrollo.

La ambientación juega un papel importante porque nos hace volar la imaginación y cuando leemos parece que estamos ahí, pero siempre con los datos justos, como un rumor suave que nos acompaña y nos hace disfrutar de todo mucho más.

Pero no todo en Corea del Sur es maravilloso. Hay una crítica social hacia este lugar donde la tradición, el respeto y la obediencia hacia la familia hace que la vida y los deseos de algunos de sus jóvenes, se vean truncados y ninguneados; como le ocurre a Song que no ve posible hacer su propia vida a pesar de todo lo que ha luchado para ser libre de su jaula de oro. Como tampoco lo tiene fácil MinHo, uno de los nuevos personajes, para poder hacer con su vida lo que quiere y ser libre de amar sin que nadie le juzgue. También conoceremos a Nana, la prima de Macarena, que tiene muchas heridas que curar y que también huye a Seúl para intentar una nueva vida y olvidar a alguien a quien conoció una noche…

Aunque adoro a todos los personajes, en esta ocasión ha habido uno que se ha colado bajo mi piel y en mi corazón casi sin que me diera cuenta: Jun. El chico que no pudo entrar en la banda y que a pesar de guardar un gran rencor, es sencillo, natural, con carisma, sexy a rabiar y con una mirada ardiente que despierta unos anhelos lectores que tendrán que esperar al siguiente libro para que descubramos todo lo que este personaje puede darnos.

Todas las relaciones de pareja se nos siguen narrando de modo que nunca nos quedamos con que se declaren lo que sienten y aquí finalice su historia, sino que vivimos su día a día y cómo afianzan su amor, porque todos tienen mucho que sanar todavía y aquí estaré yo esperando cada una de las entregas de Indomite que Natalia Sánchez Diana quiera darme.

Mysticnox

2 comentarios

  1. Tengo pendiente a esta autora, seguramente me estrene con estas historias, buen post guapa

Comentarios:

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